El tercer álbum del artista australiano Troye Sivan dio a la luz este 13 de octubre, siendo este la culminación de varios años en donde el artista se dedicó a experimentar demasiado en sus influencias musicales:
En realidad no quiero contar historias, sino hacer que cobren vida y la gente las sienta. He experimentado una gran dosis de esperanza, alegría y conexión, pero también me he sentido muy vulnerable. En los intervalos entre los confinamientos en Melbourne, cuando pudimos salir, experimenté noches tan divertidas que resultaron casi emocionales. Sentí una alegría abrumadora y una euforia indescriptible. Estaba sobrio y sudando, simplemente agradecido por estar con otras personas. Sentía gratitud por la música, la vida, la juventud, el sexo y la conexión. Por eso quise plasmar ese instante en palabras
Something to give each other, mas que contarnos una sola historia, promete ser más un recopilatorio de diferentes momentos en la vida de Troye, en especifico diez relatos repartidos en diez tracks. Descubre que fue lo que nos pareció este nuevo material.
Troye no es uno de mis artistas predilectos, pero sí es uno que disfruto demasiado escuchar. Mi primer acercamiento con el fue a partir de Bloom de 2018, en donde encontré una grata sorpresa en todo ese álbum, pues era de los primero artistas que descubría que abiertamente hablaba sobre su sexualidad, siendo un refugio para mi durante varios años.
En pandemia estrenó su EP In a Dream, en donde a lo largo de 7 canciones enmarcaba de forma magistral el proceso de ruptura y superación de su última relación amorosa. Este trabajo fue lo que hizo que viera a Sivan como una de las más grandes promesas en la música pop, pues se prestó a la experimentación de una manera fenomenal y demostró su gran potencial que tiene a la hora de crear melodías, a la par de aterrizar de manera perfecta una historia con la que logras simpatizar.
Something to give each other fue anunciado con bombos y platillos este año con el lanzamiento de Rush, ese tema que indudablemente marcó el verano de 2023, trayendo una energía completamente diferente a lo conocido por Troye, pues en esta ocasión dejaba de lado esos tonos melancólicos de sus anteriores trabajos para adentrarse en un pop sumamente energético, lo que me hizo pensar que esta sería la linea que seguiría el australiano.
Me acerqué un poco temeroso a este álbum, pues mis idealizaciones me convencieron que esto sería un giro de 180 grados en su estilo, pero esto no fue así. Sí bien el aura un tanto lúgubre y melancólica de Sivan no está tan presenta aquí, tampoco se inclinó por un pop desbordante que se prometía con Rush, más bien esto que presenta es una linea intermedia, algo que al principio no me agradó del todo, pues me conflictuó que yo ya tenía una predisposición a escuchar algo mucho más movido.
Tras varias escuchas pude notar que esta decisión de cambiar su estilo ligeramente fue lo más inteligente que Troye pudo hacer, pues en este trabajo podemos notar diferentes influencias nuevas para el artista, presente en canciones como In My Room o What's the Time Where You Are? que representan un poco las influencias de otros países como España.
Las líricas, de nueva cuenta, son el punto más fuerte en Troye, hablando de amor, desamor y las aventuras de un joven gay que ronda en sus veinte años. Creo que fue por esta misma razón que yo logré conectar con Something to give each other, pues retrata a la perfección lo bueno y lo malo que un joven adulto pasa por estos años en todos sus matices: los enamoramientos, las rupturas, el ámbito sexual y los momentos inolvidables de alegría con tus círculos más cercanos.
Con una clara influencia del pop de los noventas y boybands al mero estilo de NSYNC, Troye Sivan nos entrega un disco orgánico en donde cada canción nos retrata una época en especifico de sus 20's en donde lograras simpatizar con él desde la primera vez. Escuchar Something to give each other es como leer un pedazo del diario de Sivan, lo que logra hacerte sentir que lo conoces muy bien.
Sin tener una propuesta demasiado arriesgada, Troye logra cumplir con crecer las expectativas que la escena musical le estuvo cargando durante los últimos años. Aunque sin volarte la cabeza con su contenido, Something to give each other será un álbum que disfrutaras de principio a fin y que desearás que nunca termine.
Calificación final: 83/100
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